Guillermo Albertengo produjo su retorno al Turismo Nacional Clase 2 con el nivel con el cual dejó la divisional con problemas presupuestarios. El sanjorgense fue octavo en la final donde compitió de local, y mucha gente se acercó a verlo.
El primer entrenamiento dejó en claro el rendimiento del conjunto que sobre un Renault Clio con el número diez, lograron el mejor tiempo. Las cosas después fueron torciéndose, porque en clasificación un toque arruinó la vuelta más rápida de Albertengo y entonces quedó noveno.
Para la serie sabatina, la tercera, Guille peleó en gran manera con rivales de peso pero no pudo mantenerse porque la máquina se puso un poco inestable. Entonces el volante de San Jorge fue quinto, y la situación se puso más difícil y lejana a un podio más que factible.
La carrera final fue muy dura, con un inicio donde pudo ubicarse undécimo en el primer giro, pero con un duro escollo por delante, un contrincante que no dejaba pasarlo con maniobras defensivas en cada giro. Pero ese rival se quedó, y para las últimas vueltas Albertengo pudo atacar y oblegar rivales para terminar octavo.
Tras haber terminado la competencia, Guille afirmó: “Fue una lástima no haber podido largar un poco más adelante. El auto tenía gran ritmo pero perdimos dos puestos fundamentales en la serie. Yo estoy seguro que mi auto llegó más entero a la final, lo fuimos tocando y culminamos muy bien. Con Joel Borgobello fue duro pelear porque era mi compañero de equipo, y creo que eso ayudó a que las maniobras se dieran bien”.
Y reveló: “Por otro lado es una pena que yo no pueda seguir, ya que el equipo trabaja de forma excelente. Lo mismo le está pasando a Amadís Farina, quien anda muy bien y ahora no está corriendo pero supo andar muy bien. Cualquiera que se suba a uno de estos autos está entre los diez. En este caso, en particular quería estar más adelante pero no se pudo”.
Mauro Calandria – Prensa Guillermo Albertengo / Foto: Alejandro Gómez
