El santafesino Marcos Bobbio se preparó muy bien para la octava cita del calendario de TS1800, en Alta Gracia, y los resultados no fueron de los mejores. Llegó 14º, luego de renegar bastante el sábado y sin ligar fortuna en la prueba final.
Durante la primera jornada de actividad, en el Renault Clio de Bobbio se trabajó mucho pero no se encontró la clave para estar entre los primeros. Clasificó 14º y recién el domingo se vio un gran cambio positivo.
La competencia matinal tuvo a Bobbio muy veloz, remontando hasta el quinto lugar pero los frenos lo complicaron un poco. De todas formas, Marcos salió a la final con fe en que iba a avanzar varias colocaciones, pero rápidamente se produjo un despiste forzado que desacomodó la puesta a punto del chasis y la carrera se hizo cuesta arriba. El santafesino llegó en el puesto 14, lejano a lo que apuntaba.
“Lamentablemente me toqué un par de veces con Andrés Cief. Lo dejé entrar en la chicana y él después no me dejó en la bajada. Me pegó en la rueda y se desalineó algo en la rueda delantera izquierda. Luego en el curvón dos él me pasa por fuera y no terminó de pasarme que se cerró y me tuve que ir al pasto para no pegarnos. Veníamos en quinta a fondo, muy fuerte, y se ve que no me vio. Yo hice un trompo y por suerte nadie me pegó”, detalló Bobbio.
Y agregó: “En la serie los tiempos fueron muy buenos, pero el ritmo en la final no pudimos analizarlo por el toque en el primer giro. Teníamos para estar entre los cinco mejores seguro. Ahora vamos a recuperar el auto, y estoy agradecido a Damián Procchietto, el encargado del auto, a Esteban Pou por los motores, Matías Fernández por los amortiguadores y a todos los chicos del equipo”.
El alemán del equipo Porsche de Fórmula E, Pascal Wehrlein, fue el gran vencedor del ePrix de Miami, con el auto que le prestó al argentino Sergio Agüero en un evento promocional semanas atrás. Wehrlein dominó en Homestead, en el mítico autódromo de NASCAR, cuya divisional utilizó en variante interna.
La carrera fue muy empaquetada de movida, con el ahorro de batería suficiente en muchos de los casos para atacar en momentos más propicios. Muchos cuidaron el último modo ataque para el final, pero un accidente generó bandera roja y muchos quedaron penalizados por no cumplir el reglamento, entre ellos, quien llegó primero a la bandera a cuadros, Norman Nato (Nissan).
El episodio de incidente involucró a tres autos, y ante la inminente bandera roja, todos lanzaron el modo ataque, pero al no usarlo de forma completa, ni Nato ni otros tantos, llegaron las sanciones, y el alemán venció seguido de Lucas di Grassi (Lola) y António Félix da Costa (Porsche).
Wehrlein había sido el instructor de Sergio ‘Kun’ Agüero durante las sesiones especiales realizadas días atrás. El argentino sorprendió por su velocidad, pero también hizo dar dolores de cabeza al equipo y a un Pascal que se llevó el premio mayor.
Kyle Larson retomó la senda del triunfo en Bristol
Por por la novena fecha de la NASCAR Cup Series, en Bristol, Kyle Larson (Chevrolet) se despachó con una dominante victoria en las 500 vueltas, ganando las 3 etapas de la carrera sobre la pista de media milla de Tennessee.
Fue la segunda victoria de la temporada para el piloto del Chevrolet 5 de Hendrick Motorsports, y segunda del fin de semana tras ganar la carrera de la Xfinity Series el sábado. El domingo, Larson lideró la impresionante cantidad de 411 vueltas, incluyendo toda la Etapa 2, para lograr su 31ª victoria en la NASCAR Cup Series.
Denny Hamlin (Toyota) buscaba su tercera victoria consecutiva pero no pudo ser, no logró entrar en el ritmo de Larson y se conformó con el segundo lugar, delante de Ty Gibbs (Toyota).
Kyle Kirkwood (Andretti Global) se adjudicó la victoria en Long Beach, por la tercera fecha de la IndyCar, cortando el inicio abrumador de Álex Palou (Chip Ganassi Racing), quien de todos modos fue segundo.
Kirkwood dominó una intrigante competencia de estrategia de neumáticos y velocidad para ganar el 50º Gran Premio de Long Beach, bajo el soleado cielo del sur de California, poniendo fin a la racha de dos victorias consecutivas de Palou que llevaba desde inicio de año.
Kirkwood, oriundo de Florida, consiguió su segunda victoria en Long Beach desde la pole position en los últimos tres años, habiéndolo logrado en 2023. “Controlamos la carrera, incluso desde los entrenamientos”, dijo Kirkwood. Y agregó: “Una clasificación excelente, una carrera increíble, una estrategia increíble. Fue la ejecución total lo que nos permitió ganar la carrera de hoy, porque si Palou hubiera estado al frente, nos habría ganado, sin duda. Hoy fue una carrera de posiciones en la pista, sin banderas amarillas”.
Kirkwood lideró 46 de 90 vueltas, para mantener al español detrás. No obstante, Christian Lundgaard (McLaren), pudo superar a Felix Rosenqvist (Meyer Shank Racing) para alzarse con el último escalón del podio a cinco vueltas de ver la cuadriculada.