Peleando de igual a igual con pilotos de punta, Adrián Melnyk abrió la temporada de Fórmula 3 Santafesina en Paraná. No pudo ver la cuadriculada, pero el de Charata dejó en claro que puede subir al podio en cualquier momento de nuevo.
Estando todo el fin de semana dentro de los diez primeros, Melnyk constató que mejoró mucho su consistencia deportiva. La experiencia va dando frutos y clasificando séptimo, pudo demostrarlo.
En la primera final, a base de perseverar, llegó quinto y en la carrera del domingo, volvía a marchar quinto con perspectivas de ir más adelante incluso, pero un problema en la caja y en la última vuelta un toque con Felipe Granata, lo dejó estampado contra una contención de neumáticos.
Luego de bajarse ileso, Adrián comentó: “Veníamos bien y con un ritmo muy bueno. Teníamos para ser protagonistas pero al auto se le empezó a saltar la cuarta marcha en sectores veloces y en la olla también nos pasaba con la tercera. Veníamos a los manotazos y se nos cruzaba un poco el auto, y nos iba de cola. Pero estábamos en ritmo, y al final en un espacio que dejo se mete Granata muy bien por adentro, pero yendo a la par se le mueve el auto y me pega a mí. Fue una lástima porque se dañó bastante el auto y encima se nos fueron puntos importantes”.
Y continuó: “Gracias a Dios ninguno de los dos tenemos golpes fuertes, lo material se arregla y es lo de menos. Deportivamente ya estamos en el ritmo que tenemos que tener, aunque creo que nos falta un poquito más para estar sin problemas. Todavía hay detalles que tenemos que hermanar en la puesta a punto mía con el auto. Seguiremos trabajando, no vamos a bajar los brazos”.
Finalmente, expresó: “Agradezco a mi familia, a todo el MR Racing por lo que trabaja para poner el auto en pista, y ahora más que nunca van a tener que trabajar para reparar un auto que estaba totalmente nuevo, a Oscar Macarro como chef del grupo, a Manu, y a todos mis compañeros, y a mis sponsors que hacen que uno esté corriendo”.
Mauro Calandria – Prensa Adrián Melnyk / Foto: Hernán Rodríguez