Luis Vega y Maximiliano Giustetti no pudieron llegar en puestos importantes en la tercera fecha del Turismo Fiat Santafesino, y en Paraná la fecha con invitados no salió bien. Ambos recibieron golpes que perjudicaron el avance en pista.
Sabiendo que defender la punta del campeonato no iba a ser tarea fácil con kilos de lastre y más en la fecha especial, el volante de San Francisco con su invitado de Devoto plantearon sumar. El sábado clasificaron 16º, pero con la confianza en revertir e intentar meterse dentro de los diez más destacados.
Largando Maxi Giustetti en la primera final, arrancó estudiando la situación, y cuando ya avanzaba a paso firme, fue tocado y lo sacaron de pista, arribando 25º. Vega debió partir relegado pero con ganas de avanzar, pero fue tocado en el curvón uno y casi lo hacen chocar contra la pared. Desde el fondo se complicó sumar y ahora se perdió la punta del torneo.
“En clasificación no pudimos ser lo suficientemente claros como esperábamos. El auto funcionaba bien y si bien le dolieron muchísimo los kilos, teníamos para estar entre los diez primeros. No pudimos redondear la vuelta”, explicó el sanfrancisqueño.
Y relató: “Maxi largó en la primera serie, y haciendo una tarea impecable pero lo tocaron y le desalinearon el auto. Llegó 24º. Yo comencé retrasado y largué muy bien pero en el curvón, luego de pasar tres o cuatro autos, me golpearon de atrás y realicé un trompo cerca del paredón. Quedé último, 37º, y aceleré todo lo que pude, hasta que un elemento que se resintió, se rompió y me limité a completar la competencia”.
Finalmente, Luis analizó: “Fue una pena porque perdimos muchos puntos importantes, clave. Hay que seguir trabajando y no fue nuestro fin de semana. Pensamos en no bajar los brazos. Agradezco a Juan Bogetto, Nicolás Fernández, Guillermo, a toda mi familia, a Maxi Giustetti y a todas las firmas comerciales, por quienes vamos a redoblar los esfuerzos para volver a los primeros lugares”.
Mauro Calandria – Prensa Luis Vega / Foto: Hernán Rodríguez
El piloto del Chevrolet número 24 repitió lo hecho en 2024 y se quedó con las 500 Millas de Daytona, abriendo la temporada de NASCAR Cup Series. William Byron (Chevrolet), se quedó con una carrera que se atrasó por lluvias, pero que no frenó la pasión dentro y fuera de la pista por un nuevo año del mejor automovilismo norteamericano.
Luego del gran show previo, la presencia del presidente de los Estados Unidos Donald Trump, incluso rodando en las vueltas previas con el auto presidencial, la temporada tuvo un inicio agridulce, porque la carrera arrancó bien, pero el clima no. Las lluvias comenzaron a complicar la situación en el giro 10, y la prueba se detuvo con bandera roja por horas. Byron, justo era el puntero.
Con el Hendrick Motorsports, estuvo astuto para no formar parte de los incidentes. Luego de una ardua lucha donde los Ford de Penske conducidos por Ryan Blaney y Austin Cindric fueron grandes candidatos, Cindric quedó solo a pocos giros por un accidente que eliminó a Blaney, provocado por otro Ford de Penske, el del campeón Joey Logano.
Con cinco giros por disputar, Byron era décimo y un fuerte choque se dio en la punta, iniciado por Cole Custer (Ford) golpeando a Christopher Bell (Toyota), en el único momento donde los de Joe Gibbs Racing parecían sorprender a Hendrick y Penske. Denny Hamlin (Toyota) lideraba, y detrás, Ryan Preece (Ford) se llevó la peor parte, con un auto dañado y que voló a altísima velocidad.
Luego de constatar que no hubo consecuencias, se reanudó la prueba, y el Overtime tuvo un gran avance de Byron desde la quinta fila, olió sangre y luego de un toque que relegó a Hamlin y Cindric, Custer, y tantos otros. William Byron se fue indemne por milímetros y repitió, algo que no pasaba de los años 2019 y 2020, cuando Hamlin se llevó la gloria consecutivamente.
Tyler Reddick (Toyota) se quedó con la segunda ubicación y la leyenda Jimmie Johnson (Toyota), llegó al tercer puesto.
El galés pudo contener los embates de su compañero Takamoto Katsuta y logró una gran diferencia en la cima del Campeonato Mundial de Rally. Cinco pilotos lucharon por la victoria hasta el último día de competencia.
Elfyn Evans (Toyota Yaris) iba capturando y cediendo la punta del Rally de Suecia a medida de que pasaban los tramos, y en el último día de carrera, todo se fue cerrando a una lucha de compañeros, contra Takamoto Katsuta (Toyota Yaris), ambos del Toyota Gazoo Racing. En el anteúltimo tramo recién fue cuando Evans logró calmar parte de la presión, llegando al Power Stage como puntero de la prueba.
Para Toyota fue una definición de mucha tensión porque ambos querían ganar, sobretodo el japonés, quien tenía muy cercana la chance de su primera conquista en el WRC. Además, Toyota sabía que si ambos erraban bajo presión, Thierry Neuville (Hyundai i20) estaba a pocos segundos, lo mismo que Ött Tänak (Hyundai i20). En quinto lugar, Kalle Rovanperä (Toyota Yaris) poco podía ayudar para hacer 1-2-3.
El Power Stage tuvo a los dos máximos contendientes haciendo una excelente tarea, Evans ganó la especial y la carrera, Katsuta lo secundó a apenas 3s8, y el campeón Neuville concluyó en el tercer lugar de la premiación. Párrafo aparte, el regreso de Martins Sesks (Ford Puma) lo tuvo en gran nivel, llegando sexto siendo mejor que los pilotos de Ford a tiempo completo.
Triunfos memorables en la histórica doble fecha en Yeda
La Fórmula E inició una nueva era en esta cita en Arabia Saudita, donde debutó el ‘Pit Boost’, el repostaje de energía obligatorio para obtener un 10% de energía extra en carrera. Max Günther y Oliver Rowland se llevaron los flashes con sus grandes victorias.
En la carrera del viernes, por la fecha 3, Maximilian Günther (DS Penske) largó en pole, pero Oliver Rowland (Nissan) lo superó y parecía controlar la carrera con buena ventaja, incluso luego del Pit Boost. Además, Günther cayó al octavo puesto tras la parada, y allí comenzó una gestión increíble.
El alemán, quien se sumó a DS Penske este año, cazó a Nyck De Vries (Mahindra Racing) para volver a ser segundo y pudo ir sobre el cierre hacia Rowland, a quien atacó en la última chicana, en el último giro, para ponerse nuevamente al frente y vencer por primera vez con su nueva escuadra.
Para el sábado, la fecha 4 tuvo a un Rowland mejor preparado para no sufrir frustraciones. El británico, quien ya ganó en México y casi gana la tercera carrera, pudo prevalecer en la cuarta del año partiendo segundo, e incluso cayendo ante Jake Hughes (Maserati) en la largada.
Taylor Barnard (McLaren) lideró desde la pole, pero Rowland sacó provecho de su potencial y experiencia para ganarle a su protegido en Karting, Barnard, y hacerlo con autoridad para ser cómodo líder del certamen.
La próxima fecha será el fin de semana del 12 de abril en Miami, lugar donde se llevará a cabo una carrera para personalidades donde dentro del equipo Porsche competirá el argentino Sergio ‘Kun’ Agüero.