El EGK Competición renegó con los cuatro autos que asistió durante todo el fin de semana y el mejor resultado que obtuvo fue con Fabián Calcabrini, quien culminó quinto en el TC4000 del Sur, en tanto que el debutante Damián Pierucci finalizó decimosexto y tanto Bruno Fontanella como Leroy Porfiri desertaron de sus respectivas finales.
El fin de semana era un gran desafío para el equipo de Álvarez y tanto Esteban Kuntze como Agustín Chamorro trabajaron incansablemente en pos de tratar de revertir todas las complicaciones que tuvieron cada uno de los autos de la estructura.
Calcabrini compartió su Chevrolet Chevy con Ramiro Galarza en la fecha especial de pilotos invitados y desde el comienzo del fin de semana empezaron a renegar con una tendencia a ir de cola, la cual logró ser mejorada, pero a la hora de que el volante de Acebal salga a clasificar una falla en la bomba de nafta hizo que Galarza se ubicara décimo primero, en tanto que una vez solucionado el inconveniente Fabián registró el octavo mejor tiempo en la clasificación de titulares.
En las finales del TC4000 del Sur la Chevy de Arminda poco a poco comenzó a ganar rendimiento, permitiéndole a Ramiro arribar décimo en la final de invitados, mientras que Calcabrini logró escalar cinco puestos en su final y culminó quinto, cosechando buenos puntos para el campeonato.
En el Turismo Agrupado 1600 Leroy Porfiri compartió la butaca del Ford Escort con su padre, Edgardo ‘Fido’ Porfiri, pero lamentablemente ninguno de los dos han podido finalizar sus respectivas carreras, ya que si bien, luego de haber tenido que reparar varias veces la caja de cambios y haber podido salir a disputar sus finales, ambos culminaron al costado del camino con diferentes inconvenientes que los privaron de ver las banderas a cuadros.
Damián Pierucci comenzó teniendo que reparar el motor del Fiat 128, ya que en los entrenamientos se le rompió un botador y se le torcieron las válvulas, pero a la hora de clasificar una falla eléctrica se hizo presente, relegándolo al final del pelotón, en tanto que en las finales también tuvo que cambiar el engranaje del distribuidor y el módulo electrónico que estaban defectuosos, pero finalmente pudo dar el total de las vueltas, finalizado en la decimosexta colocación.
El Fiat 600 de Bruno Fontanella también corrió con la suerte en su contra, ya que clasificó séptimo a raíz de una merma en la potencia de la planta impulsora, la cual no pudo ser solucionada a lo largo de todo el fin de semana y además en la serie se retrasó mucho a raíz de un toque que lo obligó a recuperar terreno en la final, pero cuando venía buscando escalar posiciones, entró en trompo y colisionó con Martín Colotti (Fiat 600), situación que lo obligó a desertar por la ruptura de la dirección del bólido blanco.
El EGK Competición les agradece a Vigatech, Santa Rosa Arenas, Geza, Di Sciacio Cereales, Razzini Industrial, Daniel y Leo Zampa, Caio Funigaciones, Establecimiento El Nacho, Comuna de Arminda, Easy Call, CIT, Dynatac Phone, Credifin Express, Pintur, Fate O, Empresa Simioni, Trans-Ban, Saturni, Agro Hernández, Plyrap, Montironi, Remolpin, El Indio, Frigorífico Jap, Álvarez Confort, La Marca, Giovannetti, Ferritodo y Metalurgica Moreno por el apoyo que le brindan.
Mariano Pallotti . Prensa EGK Competición / Fotos Nicolás Riccardi
